El consumo de bebidas alcohólicas y la conducción son dos acciones que jamás deben producirse juntas, ni manejando un automóvil ni tampoco un ciclomotor.
El Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Seguridad y Circulación, va a iniciar una campaña dirigida a los estudiantes murcianos de 4º de ESO para que sientan de primera mano los efectos del alcohol al volante. La explicación no será teórica, sino práctica y para ello contarán con unas gafas especiales que reproducen las condiciones en las que se conduce después de consumir bebidas alcohólicas.
Los primeros en conocer la experiencia han sido los alumnos del IES Licenciado Cascales que esta mañana han acudido a la Plaza Belluga para poner en práctica la campaña.
En presencia del Alcalde, Miguel Ángel Cámara, y de la Concejal de Seguridad y Circulación, Nuria Fuentes, los estudiantes, ataviados con las lentes especiales, han efectuado un recorrido en un espacio de 50 metros y eslálom entre conos para comprobar de forma directa en qué estado conducen tras ingerir alcohol. También se han sometido a otras pruebas: poner lápices, uno a uno, dentro de un portalápices, caminar por una línea recta y lanzamiento de pelotas.
Los protagonistas de hoy han sido los alumnos del IES Licenciado Cascales, pero podrán participar todos los que lo deseen. Para ello, los agentes de la Policía Local se están poniendo en contacto con los centros educativos para organizar la misma experiencia en los patios escolares.
El Alcalde, Miguel Ángel Cámara, ha asistido esta mañana a la presentación pública de esta campaña de prevención para una conducción responsable diseñada especialmente para los menores, pues precisamente diferentes estudios indican que el inicio del consumo de alcohol se produce alrededor de los 14 años. A esa edad, además, tienen permiso para conducir ciclomotores.
El riesgo de accidentes se multiplica
La conducción bajo la influencia de estas bebidas implica un elevado riesgo de sufrir un accidente, razón por la cual el Ayuntamiento continúa en su línea de apoyar la prevención entre la población adolescente y juvenil.
El riesgo de accidente mortal se multiplica por 2 con una tasa de 0,5 g/l; por 10 con 0,8 g/l; por 35 con 1,2 g/l y por 80 con 2,0 g/l. En función de las diferentes tasas ingeridas, los efectos del alcohol en la conducción se concretan en:
- Entre 0,3 u 0,5 gramos de alcohol por litro de sangre. Principio de sensación de euforia. El conductor asume riesgos no habituales. Ligeros trastornos de la visión. La estimación de las distancias se ve alterada, lo que implica peligro para adelantar.
- Entre 0,5 y 0,8 g/l .- Se alarga el tiempo de reacción. Trastornos de la visión lateral: el conductor tiene dificultades para distinguir las señales, los peatones que quieren cruzar y el tráfico de las calles perpendiculares.
- A partir de 0,8 g/l.- Dificultad para tomar decisiones y adaptar la conducción a las circunstancias. La coordinación y la sincronización de movimientos dejan de ser controladas.
La Policía Local ha realizado desde enero hasta octubre de este año un total de 13.046 pruebas de alcoholemia a conductores de las cuales 1.255 dieron positivo, siendo 1.163 hombres y 92 mujeres. De esta cifra, 470 han sido denunciadas por vía administrativa y el resto por vía penal. El 50% de estas pruebas positivas de alcoholemia se hicieron entre las 3 y las 5 de la madrugada mientras que el 70% fueron de personas entre los 18 y los 39 años