El campo de fútbol de Cabezo de Torres estrena accesos y aparcamiento, a lo que se une el nuevo pavimento en la calle de la Rambla, con una inversión de medio millón de euros

La vicealcaldesa y concejal de Fomento y Patrimonio, Rebeca Pérez, informa en Junta de Gobierno de los proyectos llevados a cabo en la pedanía, trabajos gracias a los cuales la zona deportiva junto al pabellón municipal ha ganado en accesibilidad

El Ayuntamiento de Murcia ha invertido en las últimas semanas más de medio millón de euros en varios proyectos en la pedanía de Cabezo de Torres, trabajos que acaban de finalizar y de los que se ha informado este viernes en la reunión semanal de la Junta de Gobierno.

En concreto, se trata del asfaltado de toda la zona de la calle de la Rambla, con una inversión de 210.000 euros, a lo que se suma la adecuación de accesos y nuevo aparcamiento del campo de fútbol (más de 33.000 euros) y sustitución del césped de esta instalación deportiva (cerca de 300.000 euros). Con estos trabajos, el campo de fútbol de Cabezo de Torres gana en accesibilidad y una nueva zona de estacionamiento gracias a la cual se han puesto a disposición de los usuarios un total de 20 plazas señalizadas, de las que dos son de uso exclusivo para personas con discapacidad y movilidad reducida.

La vicealcaldesa y concejal de Fomento y Patrimonio, Rebeca Pérez, indica que el objetivo del proyecto era dotar de aparcamientos adecuados y una mejor accesibilidad al campo de fútbol del Cabezo de Torres desde la calle Mayor. Para ello se han pavimentado más de 6oo metros de superficie con aglomerado asfaltico una vez nivelado el terreno, manteniendo el drenaje de las escorrentías superficiales.

Las obras han comprendido una primera limpieza y desbroce del terreno y el desmontaje del vallado existente en el área de actuación, así como la ejecución de un muro de hormigón armado de unos 40 metros de longitud y aproximadamente 1,2 m de altura en el lindero con los terrenos del campo de futbol, lo que ha permitido aumentar la superficie y conseguir las cotas de terreno que obligan las pendientes exigidas por las escorrentías. Sobre el muro se ha levantado una valla continua a base de cuadradillos de acero galvanizado similar a la existente que delimita el equipamiento con la calle Mayor.

También se ha suprimido uno de los postes existentes que ocupan el área de aparcamiento y se ha adecuado el partidor y arqueta de tajaderas y válvulas, según indicaciones de la Junta de Hacendados, reservando un espacio para el uso exclusivo de las maniobras de explotación de la Acequia de Churra la Vieja y Caracol, que discurren bajo el aparcamiento.

Mientras que en la zona pavimentada de la Rambla se ejecutará una acera de adoquín sustituyendo a la existente de la calle Mayor.

Protección del Sitio Histórico de Monteagudo y Cabezo de Torres

La zona donde se han llevado a cabo estos proyectos se encuentra dentro del área protegida de Sitio Histórico de Monteagudo y Cabezo de Torres, a lo que se une su proximidad al Molino Armero, actualmente en restauración, lo que ha hecho necesario que todos los trabajos hayan contado con la aprobación de los servicios de Cultura del Ayuntamiento de Murcia y de la Comunidad Autónoma, tareas que también han sido supervisadas por un arqueólogo continuamente.

Noticias de Murcia

Dentro de los 250 actos programados en el Gran Árbol de Navidad están los 25 conciertos que se celebran cada noche con música de todos los estilos como pop, rock, ópera, flamenco, música electrónica, zarzuela, indie, jazz y folk

Durante estas fechas se publicarán diversos vídeos con recomendaciones de todo tipo, con el fin de que los murcianos puedan disfrutar de estas fiestas con tranquilidad

José Guillén y Diego Avilés han visitado esta tarde el festival gratuito que con más de 100 puestos de juego y 15 espacios reúne lo mejor de los videojuegos, las nuevas tecnologías y la cultura digital

Inaugurado en 1902, está considerado como uno de los hitos constructivos de su tiempo, por ser el segundo puente de la ciudad y por introducir el hierro como material, entendido entonces como un signo de modernidad