Serrano va a causar un grave perjuicio a las arcas públicas del Ayuntamiento, al exonerar del pago del canon, además, va a deteriorar la imagen de unos festejos de relevancia internacional
El PP también ha pedido por escrito su personación en todos los expedientes relativos al procedimiento ordinario y de urgencia, la sanción a la empresa, la adjudicación directa y el convenio con los cofrades, los huertanos y los sardineros que ha realizado el gobierno socialista en su caótica gestión del contrato de sillas
Los populares exigen revisar toda la documentación existente, ante los vaivenes y los continuos bandazos que ha dado el PSOE, pudiendo incurrir en irregularidades administrativas que deben aclararse cuanto antes
Jesús Pacheco: "El gobierno socialista ha demostrado que no está a la altura de la Semana Santa y las Fiestas de Primavera de Murcia. Desde el PP, lo hemos estado avisando desde el año pasado, pero el alcalde del PSOE ha demostrado que está acabado y es incapaz de gestionar como los murcianos merecen"
El Partido Popular de Murcia reitera que el alcalde socialista José Antonio Serrano no puede permanecer impasible, ni quedar impune por el perjuicio económico y social que ha generado con el escándalo de las sillas y debe asumir responsabilidades personales.
Con la intención de aclarar lo sucedido y que se depuren responsabilidades ante el caos causado, el concejal del PP Jesús Pacheco ha anunciado que su grupo ha solicitado la elaboración de un informe jurídico acerca de las responsabilidades personales que se deriven de haber tomado una decisión política, como es la exoneración del pago del canon, que supone un menoscabo para las arcas municipales, teniendo abiertos procedimientos administrativos de forma paralela.
Al respecto, el concejal popular ha señalado que el alcalde socialista va a causar un grave perjuicio a las arcas públicas del Ayuntamiento, al exonerar del pago del canon tras ser incapaz de concretar ninguno de los tres procedimientos de adjudicación que inició, además, va a deteriorar la imagen de unos festejos de relevancia internacional.
El PSOE pidió explicaciones en 2020 por la rebaja del canon que ahora elimina
El PP recuerda que el actual portavoz del PSOE municipal, Enrique Lorca, puso el grito en el cielo en 2020 porque el Ayuntamiento rebajó el canon del contrato de la instalación de las sillas. Sin embargo, "ahora que está en el gobierno pretende que el Consistorio no perciba nada por el canon y le parece fenomenal. Este doble rasero evidencia que los socialistas no son de fiar".
Además, el Grupo Popular ha solicitado su personación en todos los expedientes relativos al procedimiento ordinario y de urgencia, la sanción a la empresa, la adjudicación directa y el convenio con los cofrades, los huertanos y los sardineros que ha realizado el gobierno socialista en su caótica gestión del contrato de sillas.
El edil Pacheco ha explicado que el PP exige revisar toda la documentación existente, ante los vaivenes y los continuos bandazos que ha dado el PSOE, pudiendo incurrir en irregularidades administrativas que deben aclararse cuanto antes.
El gobierno socialista está acabado
Por ello, Jesús Pacheco ha manifestado que "el gobierno socialista ha demostrado que no está a la altura de la Semana Santa y las Fiestas de Primavera de Murcia. Desde el PP, lo hemos estado avisando desde el año pasado, pero el alcalde del PSOE ha demostrado que está acabado y es incapaz de gestionar como los murcianos merecen".
El Grupo Popular recuerda que la gestión de las sillas simboliza la incompetencia del gobierno socialista: el alcalde avocó las competencias sobre Contratación a Mario Gómez, inició tres procedimientos distintos, buscó a la misma empresa que vetó y ahora, a 12 días del inicio de Semana Santa, endosa el problema que él mismo ha generado a la sociedad civil, lo que supone un gesto de máxima irresponsabilidad, incapacidad y cobardía.
El gobierno del PSOE demuestra cada día que se encuentra absolutamente en funciones y apurando su tiempo de descuento. Los bandazos constantes que lleva dando durante dos años han sumido al Ayuntamiento en una deriva de parálisis y descontrol.