Las Instituciones Públicas deben mejorar la formación del personal público e incrementar los dispositivos que garanticen la protección de las mujeres ante cualquier tipo de violencia

Cuanto más difunda la ultraderecha su discurso negacionista, más intensas serán nuestras acciones, pues no retrocederemos en el camino de la libertad, la igualdad y los derechos conquistados.

El asesinato, el maltrato físico y psicológico, la violación y otros abusos sexuales, el acoso y la discriminación en todos los ámbitos sociales, culturales, económicos y políticos, continúan siendo la expresión del machismo que sufrimos las mujeres. Una lacra que no cesa, y que un año más denunciaremos en la calle el próximo 25 de Noviembre con una manifestación que recorrerá las calles de Murcia. Con ella culminaremos las múltiples acciones de protesta y concienciación que hemos llevado a cabo este año y que continuaremos realizando.

Resulta escalofriante que en nuestro país 37 mujeres que han sido asesinadas este año a manos de sus parejas o ex parejas, por el hecho mismo de ser mujeres.

Esta cifra terrible se elevaría hasta 70 si fueran confirmados aquellos casos con indicios que apuntan a que otras mujeres murieron a manos de hombres con los mantenían o tuvieron una relación sentimental. Pero lo que es incuestionable es que ya son 1.118 las mujeres asesinadas desde que se disponen de datos en 2003, víctimas de la crueldad de la sociedad patriarcal en la que vivimos.

A estas manifestaciones de violencia no han sido ajenos niños y niñas, pues los maltratadores han segado la vida durante el año 2021, de acuerdo con los datos oficiales, a 5 menores. Actos penosos que tienen como finalidad provocar mayor dolor a sus madres. A ellos se suman 19 niños y niñas que han quedado huérfanos de sus madres durante 2021, cifra que se eleva a 325 si tenemos en cuenta el dato acumulado de menores que han quedado huérfanos y huérfanas desde 2013 por haber sido asesinadas sus madres a manos de sus parejas o exparejas. 6 de estas criaturas residen en la Región de Murcia.

El número de denuncias por violencia de género realizadas durante este año 2021, en la Región de Murcia, se elevan a 3.127, teniendo en cuenta que el confinamiento ha sido un lastre añadido para las mujeres, que no han actuado con el fin de protegerse de mayores riesgos. No obstante, las órdenes de protección policial se elevan a 1.939 casos. Han sido incoadas 281 órdenes de protección, de las cuales fueron adoptadas 222 puesto que en los demás casos no fue apreciada la necesidad.

Durante el presente año han sido instalados 296 dispositivos "Cometa" ( brazaletes de pequeñas dimensiones que emiten transmisiones de radiofrecuencia en caso de incumplimiento de medidas de alejamiento). A través de este dispositivo es posible detectar cualquier manipulación o ruptura para actuar con inmediatez y prestar seguridad a la víctima.

Algunos de ellos ya han sido des instalados, aunque 108 siguen activos en estos momentos. Esta actuación está relacionada con los Órganos Judiciales, el Ministerio Fiscal y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El centro de control está operativo las 24 horas al día, 365 días al año.

Otro recurso a disposición de las mujeres o personas cercanas, es la atención telefónica que ofrece el número de teléfono gratuito 016 o el servicio online 016-online@mscbs.es, desde donde se presta información y asesoramiento jurídico a posibles víctimas de violencia machista, durante todo el día y todo el año, con derivación de llamadas de emergencia al 112 en los casos necesarios. En lo que va de año el número de llamadas realizadas al 016 desde la Región de Murcia, durante este año 2021 es de 1.620.

El Servicio de Atención y Protección para mujeres víctimas de violencia, también denominado ATENPRO, está activado en la Región de Murcia para un total de 623 mujeres víctimas de violencia de género. Este sistema de protección, que consiste en tecnología telefónica móvil y de telelocalización, permite la protección inmediata ante una situación de peligro o emergencia, al permitir la geolocalización de la mujer y movilizar los recursos humanos y materiales necesarios para su protección, atención y detención del agresor. Su gestión es realizada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, que con carácter anual suscribe un Convenio de Colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias. Las mujeres que lo utilizan no deben convivir con las personas que les han sometido a maltrato y participar en programas de atención especializada para víctimas.

Víctimas de múltiples violencias machistas

Además de la Violencia Física, nos preocupa la Violencia Psicológica, que provoca temor y aislamiento de su entorno familiar o social, inseguridad, estrés, e incluso inducción al suicidio a las mujeres afectadas. La Fiscalía General del Estado, advirtió recientemente que ésta se ha visto incrementada con la violencia ejercida digitalmente, mediante internet, redes sociales, etc., bien sea ciberacoso, sexting, o groomig en el caso de contacto con menores de 16 años con fines sexuales.

Por su parte, la Violencia Sexual mediante violación, acoso o explotación sexual se ha elevado casi un 10% este año en España, provocando graves alteraciones físicas y psicológicas en las mujeres víctimas. A ello se suma la reciente visualización de la violencia obstétrica que impide ejercer el derecho a la interrupción del embarazo en centros públicos y condiciones adecuadas.

Por otra parte, existe Violencia Económica cuando se priva a la mujer de recursos económicos, prohibiéndole trabajar o no pagándole la pensión alimenticia tras un divorcio, lo que conduce a una grave situación de vulnerabilidad y falta de autoestima. En cuanto a la Violencia Laboral, incluye actuaciones como acoso y agresiones sexuales, chantaje u hostigamiento, que en caso de ser denunciado acaba en múltiples ocasiones en un despido.

Para que las Instituciones estén a la altura de estas situaciones, debería haber un mayor número de profesionales del ámbito jurídico, judicial y de seguridad para intervenir en este ámbito de forma coordinada, adquiriendo una adecuada formación. También se precisa de mayor número de juzgados de violencia de género y aumento de las Unidades de Valoración del riesgo al que están sometidas las mujeres víctimas de violencia machista.

La Asamblea Feminista tiene el convencimiento de que la violencia contra las mujeres es la expresión más dramática de la desigualdad entre sexos, así como una de las violaciones de los derechos humanos más devastadores del mundo.

Para que sensibilidad a la sociedad de la gravedad de los hechos descritos, y las instituciones mejoren e incrementen sus dispositivos, saldremos a la calle el 25 de noviembre en manifestaciones y seguiremos realizando charlas, talleres y cuantas acciones contribuyan a acabar con el machismo.

A su vez, cuanto más difunda la ultraderecha su discurso negacionista, más intensas serán nuestras acciones. No vamos a retroceder un milímetro en el camino de la libertad, la igualdad y los derechos conquistados.