Este anteproyecto se ha redactado tras el entubamiento en mayo de 2015 de un tramo de esta acequia histórica del siglo XI y que fue paralizado gracias a la intervención de la ciudadanía y colectivos en defensa de la huerta de Murcia, pretendiendo ser un ejemplo para la recuperación de otros cauces y la protección definitiva de la red de regadío por sus valores históricos, culturales y naturales.

A partir de una propuesta para la recuperación de la acequia de Raal Viejo realizada por la Asociación de Vecinos de Llano de Brujas y Murcia Huerta Viva, y aprobada en el pleno de septiembre del ayuntamiento de Murcia, ambas asociaciones han presentado el día 9 de diciembre a la concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta un anteproyecto de recuperación y puesta en valor de esta acequia. La redacción ha estado a cargo de un equipo multidisciplinar y con la participación de la asociación de vecinos con la intención de evitar la destrucción de esta acequia histórica de Llano de Brujas y hacer ver los valores culturales y ambientales que tiene la red de regadío tradicional de la huerta de Murcia.

La iniciativa ha nacido a raíz de la destrucción en mayo de otro tramo de esta acequia en donde existía una rica biodiversidad con especies protegidas como el chopo y al sauce. Destrucción que se realizó a pesar de la oposición de gran parte del vecindario y asociaciones que acudieron con intención de detener el entubamiento. El anterior concejal de Urbanismo ordenó su paralización por carecer de licencia y envió el expediente al juzgado al continuar las obras en contra de la orden.

Con este proyecto alternativo en el tramo que no se llegó a entubar, se pretende mejorar el cauce para los regantes, la accesibilidad al campo de fútbol y al instituto, y, a la vez, recuperar la biodiversidad, el paisaje y la memoria, conservando y poniendo en valor este antiguo cauce del siglo XI como herencia viva de la cultura andalusí dentro de la extensa red de regadío cuyo trazado fue fundamental para el desarrollo de la huerta y la ciudad de Murcia.

En el anteproyecto se ha estudiado la eliminación de la caña como especie invasora y su sustitución por especies de ribera autóctonas, como el álamo, el chopo, el fresno, el sauce, el almez y el olmo, así como frutales de variedades tradicionales que se encuentran en peligro de desaparición. La recuperación del hábitat será un atrayente para una numerosa avifauna y especies acuáticas que ya se están dejando ver, como el barbo, la anguila o el galápago leproso. A esa mejora ambiental hay que sumarle la visibilidad del agua que circula por la acequia y su sonido, convirtiendo el lugar en un atractivo para pasear y conocer estos valores.

Tanto Murcia Huerta Viva como la Asociación de Vecinos de Llano de Brujas quieren resaltar con este sencillo proyecto que Murcia no puede perder ese espacio fundamental e identitario formado por su huerta y las acequias y azarbes que le dan vida, y que es necesario cambiar el modelo de crecimiento destructivo ahora que todavía estamos a tiempo.

El lunes 14 ambas asociaciones fueron recibidas por el concejal de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta para explicarle el proyecto, asegurándoles que desde la concejalía lo quieren estudiar a fin de redactar el proyecto definitivo necesario para comenzar las obras. Las asociaciones hicieron hincapié en que este tipo de proyectos no se pueden hacer de forma puntual mientras se destruyen otros tramos de acequias, y que es necesaria la participación de las asociaciones ciudadanas, la Administración y la Junta de Hacendados para estudiar y poner en marcha una protección y puesta en valor de la red de regadío histórica de forma integral, que beneficie a todos y con la que se asegure para las generaciones futuras la conservación del rico patrimonio que suponen estos cauces, así como las tierras fértiles de la huerta a las que dan riego.