La huelga nacional en la enseñanza ha tenido un seguimiento desigual en la Universidad de Murcia, donde las cifras del paro en cuanto al Personal de Administración y Servicios (PAS) han estado alrededor del quince por ciento.
La asistencia a clase por parte de los alumnos ha sido también desigual según la ubicación de los centros, observándose una mayor incidencia en el campus de Espinardo, debido a las dificultades de acceso derivadas de la acción de piquetes, que también han afectado a los transportes y, en concreto, al tranvía.
La huelga cuenta con el apoyo del Consejo de Estudiantes de la Universidad de Murcia (CEUM), que en una reunión convocada al efecto mostró su adhesión a la misma.
