En Equo RM la movilidad sostenible es uno de los ejes del cambio radical que proponemos para la sociedad, no una simple moda o un lavado verde. Muchos de los integrantes de la lista de candidatos somos usuarios de transportes alternativos como la bicicleta o el transporte público y firmes defensores de ellos.
Pero vamos más allá, apostamos por ciudades para las personas, diseñadas para asegurar el bienestar, la salud y la calidad de vida de sus habitantes. Ciudades diversas en las que tengan cabida todas las generaciones, en las que recuperemos las calles para la gente de todas las edades. Por ello, propugnamos firmemente la reducción del tráfico motorizado en el centro de las ciudades por todos lo perjuicios que causa a la comunidad: contaminación, ruido, pérdida de espacio público y el gasto individual que suponen. Apostamos por ciudades compactas que no obliguen a una movilidad indeseada y hagan a los ciudadanos dependientes del vehículo privado contaminante; queremos recuperar el concepto de barrio mediterráneo donde el comercio y los servicios de proximidad son el eje vertebrador de la vida comunitaria. Por eso, incluimos en nuestro programa medidas para la limitación de centros comerciales en el extrarradio que imponen un modelo impostado bajo el señuelo de un enriquecimiento local que ya se han demostrado precario y falaz. Creemos que los planes urbanísticos han de estar integrados dentro de planes de desarrollo integral en los que se contemple la vida en común, la movilidad y la accesibilidad a los servicios cotidianos.
Sabemos que para ello es fundamental el fortalecimiento del transporte público dentro de los parámetros de la ecología y la sostenibilidad. Un transporte público que realmente conecte a la población y no vaya encaminado solamente a los centros de consumo, que sea accesible económicamente a toda la población, y asegure la eficacia y la comodidad de su uso.
Creemos firmemente en que el peatón y la bicicleta pueden ser actores fundamentales en esa transición necesaria de los hábitos de movilidad de la población y por ello defenderemos el aumento de zonas peatonales y de las infraestructuras para normalizar el uso de la bicicleta en condiciones de seguridad: carriles bici cuando sean necesarios y también zonas de calmado de tráfico y zonas 30 en las que el ciclista sea un elemento dinamizador de un tráfico más amable. Murcia reúne unas condiciones climáticas y geográficas que favorecen el uso de este medio de transporte. Por ello, desde Equo Rm, instamos al Ayuntamiento a la puesta en marcha inmediata del Plan Director de la Bicicleta de la Plan de Movilidad Urbana Sostenible que tanto se está demorando. Insistimos, además, en que esos planes sean una apuesta firme y decidida por los transportes alternativos y no una mera ordenación del tráfico motorizado. Apoyamos las alegaciones hechas a estos planes por asociaciones como 'Murcia en bici' o' La Costera Sur también existe', y exigimos que sean tenidas en cuenta en su redacción final.
Para Equo la movilidad sostenible no es solo una apuesta por el bienestar y la ecología, sino que aseguramos que puede ser un factor importante para la reactivación económica. Recogemos datos proporcionados por organizaciones como ISTAS que cifran en 700.000 la cifra de puestos de trabajo que puede proporcionar este sector. Desde la instituciones defenderemos la puesta en marcha de una Ley de movilidad Sostenible que fomente el transporte alternativo, la bicicleta, el automóvil eléctrico y la electrificación del transporte público urbano, que aumente las zonas peatonales, que contemple una fiscalidad verde favorable a la ecomovilidad, que incorpore la tasa de C02 y potencie el ferrocarril de cercanías y de mercancías. Exigiremos la moratoria de grandes infraestructuras como líneas de Ave, nuevas autopistas o aeropuertos para asegurar una correcta distribución y dosificación de los mismos y el tránsito del transporte de mercancías por carreteras a las líneas de ferrocarril.
Todas estas medidas son totalmente coherentes con nuestro programa general que propugna un cambio radical de modelo productivo en el que las energías renovables, la economía verde y la apuesta por una fiscalidad más equitativa y ecológica sean el eje vertebrador de ese cambio. Para ello, consideramos imprescindible la renovación de nuestro sistema democrático donde las instituciones sean realmente la voz de los ciudadanos y se dinamicen canales de participación ciudadana que vayan desde lo local a lo nacional. Apoyaremos medidas para asegurar la transparencia de toda la información de las entidades públicas y la apertura de los partidos políticos a la ciudadanía, con una lucha firme contra la corrupción en la que los partidos sean corresponsables junto a sus imputados en este tipo de causas.
Y, por supuesto, la ecología política y la defensa del territorio y la diversidad serán uno de nuestras reclamaciones recogidas transversalmente en todas nuestras propuestas de cambio de modelo productivo.
Desde Equo queremos mandar un mensaje de ilusión y esperanza porque es posible dar respuesta a la crisis económica, política y ecológica que vivimos desde las la ecología política y la equidad social. Es posible reiniciar este sistema, es posible otra forma de producir y consumir y es posible otro modo vida más humano y sostenible donde vivamos en campos y ciudades "sin malos humos". Equo va.