San Sebastián, 3 feb (EFE).- La Real Sociedad tratará de romper este sábado en Murcia la mala racha de las dos últimas jornadas, en las que ha conseguido un punto de seis posibles, y lo hará con bajas muy importantes en un campo en el que no ha ganado en la última década.
Los donostiarras han jugado sólo en dos ocasiones contra el Murcia en los últimos diez años, un enfrentamiento en Primera División que finalizó con empate a dos goles y el pasado año, con ambos en la división de plata, una dolorosa derrota blanquiazul por dos goles a cero.
Ante un recuperado equipo murciano, viajará además la Real con dos ausencias preocupantes para Martín Lasarte -aunque éste se niegue a admitirlo en público-, la de su mejor hombre, Xabi Prieto, y la de Dani Estrada, el lateral derecho que ha obligado a retocar toda la defensa desde su importante lesión.
Inoportuna es también la dolencia del pivote Gorka Elustondo, seria duda a día de hoy por un derrame en una de sus rodillas, mientras no están tampoco confirmados para el sábado el central Mikel Labaka y el centrocampista Sergio Rodríguez, aunque éste casi no ha contado para Martín Lasarte.
La baza oculta de Lasarte para este encuentro podría ser el debut de Franck Songo'o como titular, después de convencer al público de Anoeta en los pocos minutos de los que disfrutó la pasada jornada y demostrar que puede ser un jugador muy válido, tanto para ésta como para temporadas venideras, si la Real finalmente decide adquirirlo en propiedad al Zaragoza en el mes de junio.
Será bienvenida su ayuda sobre todo en los encuentros a domicilio, en los que los donostiarras han marcado 13 goles, una cifra interesante para un equipo medio, pero no para el segundo de la clasificación que es el décimo conjunto en esta faceta. Sus delanteros Agirretxe y Bueno han marcado sólo 12 tantos hasta ahora. EFE