Ante el nombramiento del Alcalde de Murcia como nuevo presidente del foro Europeo de la Movilidad EUROCITIES, manifestamos nuestro estupor, y más cuando en la nota emitida por el ayuntamiento se dice sin sonrojo que "Murcia...ha venido trabajando mucho en los últimos años para lograr el status que hoy se le reconoce al otorgarle la presidencia de este foro europeo.
Como ciudadanos que nos movemos a diario por esta ciudad y observamos la realidad dista mucho del bello retrato que pinta el Sr. Cámara, y como grupo político que ha hecho de la movilidad urbana ecológica y socialmente sostenible uno de sus principales caballos de batalla, nos preguntamos por los requisitos que se le han exigido a nuestro municipio y suponemos que estos responde más a una cuestión de conveniencia política que a las políticas efectivas y reales en el ámbito de la movilidad urbana sostenible que brillan por su ausencia.
Así pues no sabemos muy bien cual será nuestro papel aunque miedo nos da cuando se nos dice que "esta posición de privilegio permitirá defender posiciones y políticas de movilidad, que siendo beneficiosas para todas las ciudades europeas, se adapten a la idiosincrasia y peculiaridades de las ciudades del sur y Este de Europa, entre las que se encuentra Murcia".
Miedo nos da esta idiosincrasia que se basa en desarrollos urbanos que no tienen nada de compactos, transportes públicos privados y tercermundistas, fomento del vehículos privado y ausencia de carriles bici.
En cualquier caso, felicitamos al alcalde por este nombramiento que confiamos sirva para que, tal y como establecen los objetivos de este foro, nuestro municipio promueva una nueva cultura de movilidad urbana y le sugerimos que aproveche para copiar algo de nuestros vecinos del norte en lugar de promocionar nuestro modelo y, como aún estamos a tiempo de rectificar, le enviamos una serie de sugerencias para nuestro municipio:
Que, como muy bien reconocen los documentos de Eurocities, movilidad no sólo significa transporte, sino un conjunto de políticas coordinadas cuyo objetivo es reducir los desplazamientos y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. En otras palabras, movilidad tiene que ver, y mucho, con nuestro modelo urbanístico.
Que el objetivo de las políticas sobre movilidad y transporte tiene como objetivo mejorar la calidad de vida y la salud de los ciudadanos, no al revés.
Que cualquier política de movilidad debe de basarse en una apuesta clara por reducir los desplazamientos en vehículos privados no por potenciarlos con más carreteras y más aparcamientos en el centro.
Una movilidad sostenible implica tomarse en serio el fomento de un transporte público para eso debe su uso debe tener ventajas al frente al coche como la puntualidad y rapidez (más flota y con plataformas exclusivas que den un servicio puntual), comodidad y accesibilidad, intermodalidad, información, y desde luego ahorro para los usuarios habituales (tarjetas de trasporte trimestrales).
Un transporte público que realmente tenga como objetivo mejorar la movilidad donde se necesita y no otros intereses como revalorizar los desarrollos urbanísticos para que quien da el pelotazo, lo de al completo.
Y por supuesto y de manera prioritaria una red completa de carriles bici que no es lo mismo que las vías ciclables, ni las vías amables ni jugarse el tipo con el "fomento del uso de la bicicleta" que es de lo que prefiere hablar el alcalde según sus propias palabras.
Esther Herguedas, concejala de IU+Los Verdes del ayuntamiento de Murcia.