Estas aportaciones son para garantizar la cobertura de las necesidades más básicas de los menores (alimentación) y los medios para un acceso en condiciones de igualdad con otros menores.
Los Centros de Servicios Sociales realizan las propuestas de los menores que precisan de este apoyo especial, en base al conocimiento de las familias de origen, actuando como una medida de refuerzo de la intervención y procurando en todo momento la mejora de las condiciones de vida de los menores.