Sangonera la Seca y Citmusa mejoran su red de saneamiento

El Ayuntamiento construirá una nueva infraestructura de más de 1.200 metros con un coste de cerca de 4 millones de euros

La pedanía de Sangonera la Seca y el gran polígono del Centro Integrado de Transportes (Citmusa) mejorarán su red de saneamiento gracias a un proyecto municipal para la construcción de un colector de aguas fecales y pluviales.

Este proyecto forma parte del Plan Especial de Infraestructuras Hidráulicas Costera Sur para dar una solución a la evacuación de las aguas pluviales-fecales de Sangonera la Seca y de las nuevas urbanizaciones que se están desarrollando en la zona. Se da la circunstancia de que el actual colector de Sangonera la Seca tiene agotada su capacidad hidráulica.

Se trata de una tubería de gran diámetro, con 1.600mm, una longitud de 1.218 metros y con un coste de cerca de 4 millones de euros.

El gran colector llevará las aguas fecales por la margen derecha del Reguerón, entroncando con el colector que llega a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de Murcia. Las aguas pluviales, una vez diluidas, se verterán directamente al canal del Reguerón. El proyecto contempla la construcción de tres bombas para la impulsión de aguas fecales y tres bombas para la elevación de las aguas pluviales, así como la construcción de una pasarela peatonal sobre el Reguerón por la que discurrirá el colector y que podrá ser utilizada al mismo tiempo por los peatones. El plazo de ejecución del proyecto es de 12 meses.

La Junta de Gobierno ha aprobado el pliego de condiciones para contratar mediante procedimiento abierto la construcción de esta infraestructura.

Noticias de Murcia

El Jefe del Cuerpo de Bomberos Pedro Guiraó ha participado en una ponencia destinada a la formación a Policías y Guardias Civiles en este tipo de siniestros

El Ayuntamiento de Murcia ha destacado que 324 personas han participado en estas actividades de este centro que se encuentra en la Plaza Julián Romea desde el mes de noviembre

Los talleres de gastronomía cristiana, árabe y judía han reunido a un centenar de personas enmarcado en el Festival Internacional Tres Culturas